Hay algo sobre los animales de un tamaño excepcional que nos llama la atención. No los de gran tamaño – que también – si no los de talla por encima de lo normal. Los animales de récord, vaya. Como, por ejemplo, la captura de un opah (Lampris sp.) , también conocido como pez luna, de más de 80 kg. de peso.
Pero, ¿cómo de sorprendente es este peso? El pez capturado supera en ocho kilos al anterior galardonado. Es decir, un 10% más de peso, una diferencia bastante notable.
El mundo de la pesca deportiva es muy dado a los premios, récords y similares. Pero para poder unificarlos todos, existe un organismo internacional que se encarga de confirmar si las capturas son merecedoras de un galardón. La IGFA (International Game Fish Association) está estudiando si este ejemplar lo merece.
Es importante recordar que la IGFA no sólo se encarga de asegurarse de que las medidas son adecuadas y comparables. También vela porque se cumplan las normas sobre capturas, que no se trate de animales protegidos – o, en casos así, que se haga captura sin muerte – y, en general, que esta actividad deportiva tenga tan poco impacto ambiental como sea posible.
Y lo más sorprendente de toda esta historia es que el hecho de que hayan capturado un pez de récord no es la única noticia, ni siquiera la más sorprendente. En el mismo día y el mismo barco capturaron otros dos ejemplares – también con un tamaño considerable, aunque lejos del premiado.
Lo que a mucha gente no le dirá nada, pero es raro. Excepcional, vaya. Más que nada, porque los peces luna son animales solitarios que muy raramente nadan en grupos. Como explican los propios pescadores, estuvieron en el lugar adecuado en el momento oportuno, y con los anzuelos listos.
Aún queda una última curiosidad. El barco desde el que se pescaron los tres opahs se encontraba en aguas de la costa de California. Un lugar donde esta especie de peces es muy poco común. De hecho, tan poco común que no hay registro de una captura múltiple como este caso, y menos de animales de tallas grandes.
Lo más parecido – un opah de récord capturado, y otro más avistado – que ha ocurrido en las aguas del Pacífico californiano ocurrió hace varios años. Pero en una situación similar. En aquel año, como en este, se estaba inmerso en un fenómeno de “El Niño”, con aguas excepcionalmente cálidas. Que parecen ser las condiciones necesarias para que los opahs naden libremente en esta zona del planeta.
fuente contextotucuman