Agentes de la Guardia Civil han intervenido 168 kilogramos de “ortiguillas” (anémonas de mar) y han denunciado a diez personas por su captura ilegal en las playas de Marbella y Estepona.
También han decomisado once artes de red denominada “ortiguera”, ocho artes-tenedor utilizadas para la recolección de la especie y dos botellas de buceo y se han formulado once denuncias por supuestas infracciones administrativas, según ha informado hoy el instituto armado en un comunicado.
La captura de las anémonas, regulada en la Ley de Ordenación, Fomento y Control de Pesca Marítima, Marisqueo y la Acuicultura Marina, necesita de una licencia que otorga la Junta de Andalucía.
Las denuncias por supuestas infracciones consisten en la captura sin autorización, exceso de capturas permitidas, incumplimiento de condiciones establecidas en la autorización y el ejercicio de buceo en apnea sin señalizar la posición y la mayoría de los casos los denunciados son reincidentes en este tipo de infracción.
La actuación se inició al ser detectadas estas personas con equipo de buceo en apnea y botellas sin señalizar la posición, lo que infringe la normativa de seguridad de actividades subacuáticas.
Los submarinistas no señalaban su posición supuestamente para no ser detectados por los agentes y utilizaban a veces a terceras personas para vigilar la presencia de vehículos policiales.
Tras salir del agua depositaban las capturas en espuertas de plástico para su posterior traslado en vehículos a la provincia de Cádiz, donde supuestamente iban a ser comercializadas ilegalmente sin pasar por ningún centro de expedición o establecimiento de transformación autorizados.
La “ortiguilla” es una especie muy apreciada en la gastronomía de las provincias de Cádiz y Sevilla, se consume habitualmente en bares y restaurantes y existe una gran demanda en la hostelería, por lo que están muy cotizados y se llega a pagar entre siete y ocho euros por docena.
Desde la provincia de Cádiz se trasladan los furtivos a las zonas rocosas de las playas del litoral malagueño donde son recolectadas.
Esta actividad ilícita puede generar tanto un perjuicio económico para las personas legalmente están autorizadas como una afectación a la biodiversidad de la especie por su continua captura sin control.
fuente malagahoy