La empresa estatal del petróleo admitió el viernes que el derrame de petróleo al mar la semana pasada fue de 22.000 y no de 3.000 como se informó preliminarmente.
El derrame provocó daños en aguas y playas, mató fauna marina y perjudicó a unas 600 familias de pescadores.
La organización internacional de conservación marina Oceana dijo el viernes que “se debe esclarecer qué hay detrás de esta negligencia inexcusable”. Explicó en un comunicado que la respuesta que exige la normativa para un derrame de 22.000 litros es muy distinta a uno de 3.000 litros.
El derrame, según la estatal, se produjo por “errores mecánicos y humanos” de responsabilidad del buque Mimosa, de bandera filipina, al que la autoridad judicial le impidió salir del país. El buque estaba descargando petróleo para la empresa estatal, que se hace cargo de los daños mientras lleva adelante acciones judiciales para que paguen los responsables.
El derrame se registró el 24 de septiembre en la bahía de Quintero, 155 kilómetros al noroeste de Santiago, y desde el inicio los pescadores artesanales rebatieron la cifra de 3.000 litros informada por la empresa, que el viernes dijo que la compañía independiente estadounidense ABS, determinó que fueron 22.000 litros.
La contaminación con petróleo afectó a Quintero y otros sectores aledaños como Loncura, Ventana y Horcón, que viven de la pesca artesanal y del turismo.
En rueda de prensa, ejecutivos de la Empresa Nacional del Petróleo precisaron que han gastado unos 4.000 millones de pesos (6,8 millones de dólares) en faenas de limpieza y mitigación.
Unas 600 familias de pescadores artesanales resultaron perjudicados, más otras 30 que trabajan en las plantas de procesamiento de jibia. Se cree que seguirán al menos otros 20 días sin poder trabajar.
Marc Llambías, gerente de Refinación y Comercialización de la compañía, señaló que “la fase de limpieza está prácticamente terminada”, pero que seguirán monitoreando otras dos semanas. El crudo recogido fue dispuesto en más de 2.000 tambores. Los pescadores fueron contratados temporalmente para ayudar con la limpieza.
Silvana Ogalde, jefa de Medio Ambiente dijo que se contrataron expertas extranjeras en el manejo animal y que hasta la fecha se han rescatado 43 ejemplares, incluidos un par de pingüinos.