La sociedad de pesca de Carballiño dedicó la mañana de ayer a la captura de truchas en favor de Cruz Roja. Participaron en torno a 70 pescadores, desde las 8,00 hasta las 13,30 horas, que lograron en esta ocasión 600 ejemplares, número que supera a ediciones anteriores, en que rondaban los 450.
Los voluntarios de Cruz Roja, a pie de río, se encargaron de limpiar y clasificar las truchas, para luego guardarlas en cajas con hielo y posteriormente trasladarlas al arcón congelador que compró la agrupación primordialmente para este fin.
Una vez congeladas, Cruz Roja se encargará de distribuir el pescado en lotes, que serán donados a familias de bajos recursos económicos, dando prioridad a las que tienen niños, “ya que este pescado les aporta proteínas de alto valor biológico y lamentablemente pocas o casi nulas posibilidades tienen de comerlo”, manifiesta el presidente de Cruz Roja en Carballiño, Modesto Ojea. Esta actividad, ya consolidada anualmente, es la tercera vez que se desarrolla. El número de familias beneficiadas asciende a 60, que representan más de 200 personas, según indicaron los responsables de la agrupación.
La pesca solidaria se llevó a cabo en el coto intensivo del río Arenteiro, que se surte de las truchas que cría la sociedad deportiva en el canal de Toscaña, para realizar sueltas en cada temporada.
fuente laregion