Miles de salmones valuados en alrededor de GBP 240.000, que escaparon de una granja de Marine Harvest en Carradale, Argyll, generan preocupación por la posibilidad de que puedan cruzarse con poblaciones de peces salvajes.
Fuentes del sector informaron a FIS.com que unos 16.000 peces escaparon a través de un agujero en una red después de que una tormenta con fuertes vientos azotó la zona el pasado 2 de junio.
La Asociación del Salmón y la Trucha (S&TA) cree que los peces son maduros y van a migrar a importantes ríos salmoneros en el estuario del Clyde, y que podrían debilitar genéticamente las poblaciones silvestres.
“Hay un peligro real de que estos peces puedan sobrevivir en un número suficiente como para reproducirse con salmones silvestres en esta área, lo que llevará a la dilución genética de la población de peces silvestres con peces de piscifactoría, que descienden en gran parte de peces noruegos y no de salmones de Escocia”, señaló el representante legal de S&TA, Guy Linley-Adams.
El abogado agregó que esta es una muy mala noticia para la supervivencia a largo plazo del salmón salvaje del oeste de Escocia.
Sin embargo, Marine Harvest asegura que los peces que escaparon no son maduros, y por lo tanto no intentarán migrar a los ríos locales, sino que nadarán en el mar.
La empresa insiste en que estos salmones de cultivo, al no estar sexualmente maduros, no plantean una amenaza importante para las poblaciones de salmón locales.
El gerente de apoyo empresarial de la firma, Steve Bracken, agregó: “Los peces inmaduros no tienden a salir al mar. Es poco probable que se desplacen río arriba para reproducirse”.
Por su parte, el director general de Marine Harvest, Allan Sutherland, destacó el objetivo de la compañía es prevenir los escapes de peces y que continuarán vigilando de cerca toda la infraestructura de las granjas para conseguir que no vuelvan a ocurrir escapes en el futuro.
Este último escape de salmones de piscifactoría es considerado el mayor registrado en las granjas de salmón marino de Escocia continental desde 2009, cuando cerca de 59.000 peces se escaparon de un centro operado por Lighthouse Caledonia en Strone Point, Argyll.
fuente fis