La Guardia Costera de Estados Unidos incautó 5.4 kilogramos de cocaína de una embarcación semisumergible en el este del Pacífico.
Los tripulantes de los barcos de la Guardia Costera a cargo de la operación efectuada en Alameda, California, también arrestaron a cuatro personas que viajaban en la nave, de acuerdo a la primera oficial Allyson Conroy en declaraciones recopiladas en un reporte de KNTV.
Después del decomiso efectuado en julio pasado, la dependencia informó que las drogas tienen un valor aproximado de 181 millones de dólares. Hasta el momento, las autoridades
Los narcóticos fueron encontrados en una nave que estaba sumergida casi en su totalidad y de la que solo se observaba por encima del agua una parte de la cabina y el tubo de escape del motor.
Parte de la cocaína se perdió luego de que la embarcación se hundiera durante el arrastre.
Conroy aclaró que la embarcación se hundió durante el arrastre y se perdieron cerca de mil 800 kilogramos en el incidente, pero asegura que el hecho no provocará daños en el ambiente.
El decomiso se realizó el mes pasado, pero no se anunció hasta el miércoles, además, las autoridades reservaron los nombres de los sospechosos.
Además de esta megaincautación, el 22 de julio pasado, autoridades de Estados Unidos aseguraron un narcosubmarino cargado con más de ocho toneladas de cocaína en aguas cercanas a El Salvador.
Personal de la Marina, de la Guardia Costera, y de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, de Estados Unidos, participaron en la operación.
El semisumergible fue detectado en aguas internacionales cerca de las costas de El Salvador por aeronaves estadounidenses y fue interceptado por la Guardia Costera después que una lancha rápida empezó a acercarse.
La intercepción es parte de un plan realizado por 15 naciones contra el tráfico internacional de estupefacientes.
Las naves semisumergibles suelen tener capacidad para hasta cuatro personas, se ingresa por la escotilla, y cuentan con motores de alto desempeño y un timón sencillo.
Están recubiertos de fibra de vidrio, para evitar ser detectadas por radares, y algunas partes son de metal.
La embarcación estaba pintada de un color verde o azul turquesa, lo que le permitía confundirse con el mar para pasar desapercibido, además de que era de fibra de vidrio.
Además, el 21 de octubre de 2014 un submarino capaz de realizar un viaje desde Colombia a México sin necesidad de salir a la superficie fue localizada en las selvas de Ecuador.
La nave presuntamente pertenecía a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Otro aparto similar fue localizado en Costa Rica en mayo de 2010, con 7 toneladas de cocaína.