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Salma Hayek attending the London Filmmaker Breakfast Photocall as part of the Sundance Film Festival: London, held at Picturehouse Central.

SALMA HAYEK Y LA VEZ QUE TEMIÓ POR SU VIDA TRAS BUCEAR

unque antes estaba alejada de las redes sociales, Salma Hayek poco a poco ha mostrado en su cuenta de Instagram aspectos que poco conocíamos de ella, como su pasión por el buceo, el cual practica desde hace 40 años.

La actriz compartió esta semana una imagen en la que aparece en las profundidades del mar, enfundada en un traje de buzo, y aunque en la foto no se aprecia bien, parece que quien está con ella es su marido, el empresario francés François-Henri Pinault.

En la instantánea, Salma aparece haciendo una seña, la cual le dedica al escritor Mike White, del filme Beatriz at Dinner.

“#mikewhite muchísimas gracias por escribirme el extraordinario personaje de #beatriz y por enseñarme la señal que hicimos #bajoelagua especialmente para ti”, escribió la mexicana, quien tiene 50 años de edad, para describir la fotografía.

salma-le-dedico-esta-señal-al-escritor-mike-white.

Esta imagen sólo es una prueba de la enorme felicidad que siente al bucear. De hecho, hace unos días, Salma contó en el programa The Late Late Show with James Corden que bucea desde los 10 años, y aunque siempre ha tenido muy buenas experiencias, en una ocasión le ocurrió algo horrible.

En cuarenta años, por supuesto, he buceado con cientos de tiburones, pasan y me empujan cuando van a buscar algo, pero la vez que fue realmente peligroso… A mí me gusta bucear profundo y, en una ocasión, fue muy, muy, muy profundo e iba con la computadora que te dice si tu sangre tiene burbujas y te vas a morir, porque sí era muy profundo.

Cuando subí a la superficie, tenía muchos síntomas, que bien podían haber sido causados por la cerveza que tomé la noche anterior, pero por si las dudas, la persona que estaba conmigo entró en pánico y llamó a la ambulancia. Yo decía que estaba bien, que estaba bien; de hecho estaba filmando una película, estaba en la sala de maquillaje, y de ahí me llevaron en ambulancia a una cámara de descompresión, en donde tienes que estar por ocho horas, y fue horrible porque soy claustrofóbica”, comenzó a contar la actriz.

Lo peor, añadió, fue que la encerraron con un hombre nativo de Bahamas, lugar donde se encontraba filmando la película, porque él tenía como responsabilidad evitar que ella se quedara dormida, y si lo hacía, tenía la encomienda de despertarla pegándole con su mano en la cabeza. Y es que en ese lugar no podía tener ni computadora ni algún libro, porque las hojas podían prenderse.

 

Ese es su trabajo. Estaba aburrido y estaba deseando que me durmiera para poder ir a pegarme, y lo peor del caso es que tenía muchas flatulencias; entonces, no sólo estaba loco, sino también lleno de gas. Temía por mi vida, porque si no te permiten entrar con libros porque las hojas se pueden prender, imagínate esa cámara llena de gas. Fue horrible, los ojos me lloraban por la cantidad de gas que había, y le dije: ‘Lo siento mucho, pero ¿no puedes aguantarte?

Simplemente se los echaba tronados, y me contestó: ‘No, soy miserable aquí, lo menos que puedo hacer es echarme un buen pedo’. Y luego pensé cómo le íbamos a hacer si él o yo necesitábamos ir al baño, y él tomó debajo de su asiento un pequeño plato, y dijo: ‘Hay que hacerlo justo aquí, enfrente de mí, y yo tengo que hacer enfrente de ti. Imagínate que tan cercanos nos vamos a volver antes de que acabe esta experiencia’. Fue horrible, así que jamás volveré a bucear tan profundo”, terminó de contar Salma, en medio de las risas del público y del conductor del programa.

fuente .zeleb.

 

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