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El deshielo pone en peligro a los dos exploradores que cruzaban el Báltico

El pasado 3 de marzo de 2104 los exploradores Paco Acedo (buceador extremo) y Jesús Noriega (deportista discapacitado) culminaron con éxito la travesía sobre el mar Báltico completando más de 200 km durante 10 días de marcha ininterrumpidos, convirtiéndose así en los primeros expedicionarios que realizan este trayecto combinando esquí y buceo bajo el hielo.

Para Paco Acedo y Jesús Noriega, la expedición ha sido todo un éxito puesto que “no sólo hemos logrado el objetivo de atravesar el Báltico desde Finlandia hasta Suecia, sino que lo hemos logrado en total autonomía transportando por nosotros mismos todo el material necesario incluido el equipo para el buceo, en unas condiciones climatológicas tan adversas que en varias ocasiones nos hicieron dudar sobre la posibilidad de alcanzar nuestra meta”. El deportista discapacitado Jesús Noriega, el cual alcanzó el Polo Sur en 2009 afirma que debido a las pésimas condiciones del hielo “esta ha sido con diferencia una de las expediciones más duras y con mayor riesgo en las que he participado hasta el momento”.

Paco Acedo explica que las condiciones a las que se enfrentaron en el mar Báltico fueron muy duras desde el primer momento por el estado del hielo. El deportista cordobés recuerda que “el segundo día y a más de 60 Km de tierra, el Báltico nos mostró la peor de sus caras, deshelando el hielo que esperábamos encontrar en nuestra ruta y topándonos sin previo aviso con mar abierto. Una situación tremendamente peligrosa que nos obligó a huir literalmente hacia el norte durante la noche. Desde ese momento el Báltico puso a prueba diariamente nuestra determinación por cruzarlo obligándonos a modificar nuestra ruta hasta en cuatro ocasiones para evitar acabar sumergidos en sus aguas”.

Todas estas dificultades obligaron a Paco y Jesús a recorrer durante largas jornadas, algunas de 15 horas ininterrumpidas, más de 200 km de los 140 km previstos inicialmente, arrastrando un total de cuatro pulkas, dos por cada expedicionario, repartiéndose un peso de 65 Kg para cada uno de ellos. Jesús Noriega comenta que “pese a que soportamos rachas de viento de hasta 70 km por hora, creando una sensación térmica de unos -24ºC, nuestro mayor problema fueron las altas temperaturas que rondaban los -1º C o -2º C, unas temperaturas que jamás se habían registrado anteriormente en esta época del año, y las cuales hacían de la superficie del Báltico un lugar muy peligroso, obligándonos a avanzar en multitud de ocasiones sobre charcos de agua de hasta 20 cm o por amplias franjas de hielo fracturado, asumiendo un riesgo con el que no habíamos contado e impidiéndonos cruzar los canales de agua abiertos por los rompehielos a nuestro paso, pues estos no llegaban a congelarse en ningún momento”.

Paco Acedo añade que “otro de los momentos más tensos fue comprobar al amanecer que el hielo sobre el que habíamos acampado, cerca de uno de uno de los canales abierto por los rompehielos durante la noche, se había fracturado y nos encontrábamos sobre un témpano de hielo flotante rodeado por enormes grietas. Incluso, en algunas partes de nuestra travesía, nos vimos sorprendidos por el gran tráfico de rompehielos y enormes cargueros que habitualmente operan en la zona en esta época, que poco a poco agrandan los canales hasta incluso los 200 metros de anchura. Puesto que el canal no congelaba tuvimos que asumir riesgos para cruzarlos saltando sobre los bloques de hielo para lograr alcanzar la otra orilla. En una ocasión, un helicóptero de los guardacostas finlandeses se presentó para hacernos retroceder indicándonos que estábamos en una zona muy peligrosa, pese a que finalmente nos permitieron continuar asumiendo por nuestra parte el riesgo que suponía”.

Paco Acedo llevó a cabo por primera vez en la historia inmersiones bajo el hielo en el centro del mar Báltico, entre Finlandia y Suecia. El expedicionario comenta que “las condiciones eran pésimas para llevar a cabo un buceo de estas características. Mucho viento, los equipos se congelaban, días sin sol con muy poca visibilidad bajo el hielo, y en definitiva un hielo con mucho movimiento que no me inspiraba ninguna confianza, lo cual no impidió que culminásemos el reto asumiendo que a mayor riesgo mayor recompensa”.

La expedición Crossing the Ice colaboró en su apartado científico con un equipo de biólogos marinos de “Metsahallitus” una organización perteneciente al gobierno de Finlandia y encargada de investigar y salvaguardar todos los entornos naturales de dicho país.

Ambos expedicionarios comentan que “la fase final del trayecto fue la más dura sin duda. Nos encontramos con kilómetros de hielo caótico que nos ponía al límite físicamente, avanzando una media de 6 Km cada 7 horas y obligándonos a avanzar durante la noche para poder alcanzar la costa de Suecia en el tiempo previsto”.

Con esta nueva expedición, Paco Acedo añade un nuevo capítulo a su currículum como buceador extremo en regiones árticas y antárticas, y a través del cual continúa con el entrenamiento para el proyecto SUBPOLAR 90º, que pretende alcanzar buceando el Polo Norte Geográfico. En el año 2010 llevó a cabo en solitario la primera “Vuelta al Mundo Submarina” recorriendo 90.000 Km y buceando en los rincones más remotos e inexplorados del planeta. En 2011-12 llevó a cabo la expedición “Testigos del Deshielo”, la cual le llevó a recorrer buceando Siberia, Groenlandia y Svalbard, realizando un estudio medioambiental avalado por la Universidad de Córdoba sobre el calentamiento global y su impacto en los últimos pobladores del ártico. Además en su historial deportivo también consta como el primer expedicionario que ha conseguido bucear bajo los hielos de la población más al norte del planeta, Siorapaluk, en la región de Thule (Groenlandia), dentro de su proyecto “Buceo en el fin del Mundo”, durante el cual vivió con los últimos cazadores inuit del norte de Groenlandia aprendiendo sus ancestrales técnicas para convivir con el hielo y el frío extremo. Entre otras expediciones destacan la travesía en solitario por Ecuador e Islas Galápagos, o la travesía por Indonesia y las islas del Pacífico.

Por su parte, Jesús Noriega completa un nuevo reto deportivo y social, demostrando una vez más la capacidad de las personas independientemente de sus limitaciones, demostrando que con lucha, esfuerzo y perseverancia todo se puede conseguir. Así mismo, acumula una nueva experiencia en expediciones extremas que se une a las anteriormente realizadas: “Polo Sur Sin Límites 2009”, formando parte de la primera expedición de discapacitados al Polo Sur geográfico, travesías invernales por tierras Groenlandesas y nórdicas, así como diversas expediciones de montaña que le llevaron hasta la cordillera blanca en Perú. Alpinista, buceador avanzado, fotógrafo submarino y especialista en tecnología y comunicaciones, en la actualidad compite en triatlón paralímpico con el objetivo de participar en la Paraolimpiada de RIO 2016.

Crossing the Ice afronta esta aventura sobre el Mar Báltico con el patrocinio del Instituto Municipal de Deportes de Córdoba, Córdoba ciudad Europea del Deporte 2014, Sociedad Geográfica española, Metsahallitus, Subpolar 90º, Triatlón Sierra Norte y Excmo. Ayuntamiento de Córdoba.
fuente bajoelagua
http://www.bajoelagua.com/buceo/noticias/2014-03-17/deshielo-pone-peligro-exploradores-cruzaron-0820.html

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