La Corvina, una especie marina de la familia Sciaenidae, no es muy habitual por el Cantábrico, y menos del tamaño de la que capturó el Cadrado, un barco propiedad de Javier Sánchez, patrón mayor de San Cibrao, y sus hermanos. El ejemplar midió 1,5 metros y pesó 18, 300 kilos, y según Sánchez, «foi unha sorpresa; é raro, temos collido unha ou dúas ao ano, pero nunca deste tamaño». La singular captura tuvo lugar ayer cerca de la isla Coelleira. «Chegounos sin avisar, de costado, e viña pacífica de todo», dijo el patrón que faenaba con palangrillo a la lubina. Estaba prevista su venta en la lonja de Burela.
fuente lavozdegalicia