Como lo marca la historia, la pesca ha sido una de las primeras actividades del hombre para satisfacer su necesidad alimentaria, ya sea como recolección al bajar la marea o por medio de modalidades de caza, tal como la lanza, el arco y la flecha.
Esta acción del hombre prehistórico se puede ver plasmada en distintos grabados que se han encontrado en distintas partes del mundo y con el correr fue sufriendo cambios. En tanto, hoy en día se considera también un deporte.
En Río Gallegos no faltan los amantes de este deporte y se pudo ver plasmado en el concurso de pesca organizado por el municipio, en el marco del Aniversario 130° de la ciudad, donde participaron un total de 233 concursantes.
Otro claro reflejo, fue la congregación de unas 5 mil personas en el XV Encuentro de Pesca “Amor y Oportunidad” en Caleta Olivia, organizado por la Escuela Especial N°2 con la intención es integrar a todos los chicos a través de la pesca e ir derribando barreras ideológicas entre todos.
Pero también hay otra realidad y es que no todos lo hacen como deporte y hobby, sino que son cuantiosos los pescadores que se acercan al mar con la intención (e ilusión) de tener una buena jornada para poder llevar de comer a su hogar.
La pieza buscada- Así lo expresaron distintos pescadores, alegando que esta práctica “es algo barata, sólo hace falta una lata, varios metros de hilo y un poco de pollo para encarnar” y en cuestión de horas pueden conseguir un número importante de peces que ayuda al bolsillo.
Una de las personas indicó que favorecía la cercanía de la costanera local, lugar que cada vez es más concurrido para la pesca. “Se complica comprar en una pescadería, no todos tenemos el dinero, pero con una tarde buena nos hemos llevado hasta 30 peces”, contó un hombre habitué de la zona. Además, “si sacás uno de cuatro o cinco kilos, lindo momento para uno que pesca y aguarda por sacar una gran pieza, pueden comer unas cinco personas y estamos hablando de un solo pez, mirá sino es una fuente importante y valiosa”.
La forma de cocinarlo es diversa, sólo basta con limpiarlo bien y tener algunos condimentos. Empanadas, al horno, a la parrilla, frito, ensalada, milanesa, sopa y un sinfín de recetas a la hora de pensar en un plato.
“Si venís en la semana, te aseguro que dos días, por lo menos, no te volvés con las manos vacías”, manifestó una de las voces, recalcando que “hay que tener en cuenta el horario de la marea y listo, es algo saludable, uno se va haciendo compañero de los demás pescadores”.
Niños, grandes, mujeres, la pesca no distingue a la hora de lanzar la caña o el tarro en busca de la comida o, simplemente, de ese momento de distracción, en el cual muchos alegan que mediante este deporte-pasión “uno se olvida de todo” y “descansa la cabeza”.
fuente tiemposur